Llega la terrible hora de la despedida. Lo único que puede consolarnos, es que tanto vosotras y vosotros como yo, descansaremos un rato de la difícil tarea de fingirnos cariño, jeje.
A partir de ahora éste será uno de los medios por los que podréis saber de mí. También existen otros; mi número de cuenta, la dirección física a la que pueden llegar jamones de bellota y por supuesto podréis soñar conmigo.
Sufriré con vuestra ausencia e intentaré consolaros de la mía, con las fotos de los parajes maravillosos que me esperan.
Lo siento, debo irme ya.
10 comentarios:
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Querida Martu,
esto de los bloggs y blaggs y mails multitudinarios me tiene un poco acojoná...así que plis mándame un mail a mi gmail, anda lindaa!! en fin, aprovecho este espacio de "haga su comentario" para comentarte que yo también te essshhhoo mucho de menos, que te bajaste a Chile y al no saber no te pasé el contacto de Marianela, así que si vuelves avisa vía blagg y te lo mando...mmmm...que quisiera saber si tienes algún tfno de contacto, es decir, que al marcarlo salga tu voz o alguien te avise para que te pongas al aparatooo!!! te mando besos y un abrazo de grandeeeee....espero que estés tan tan allí que no se te distinga entre las bolivianas...!
Como tu padrino oficial de blog, te doy la bienvenida a este alucinante mundo. A disfrutar y ya verás cómo lo de esta noche es simbólico; ha ocurrido por algo bueno, seguro, jeje...
Muchos besos y escribeee!!